Podría ser más fácil acercar ahora a Manizales a la ciudad de los niños de la que habla el pensador y psicopedagogo italiano Francesco Tonucci, quien visitó esta capital hace unos 17 años y dio pautas sobre cómo lograrlo. Las características de nuestra infancia estarían haciendo más viable esa posibilidad, como lo está confirmando el Informe Cómo Vamos en Primera Infancia 2024.
Que el municipio tenga menos niños entre 0 y 5 años, pasando de 27.563 en el 2020 a 26.102 en el 2024, permite deducir que hay mayores recursos en los presupuestos para cubrir a esta población en su totalidad y con acciones mucho más cualificadas, que cuando se tienen grandes grupos etarios por los que las instituciones de carácter público y privado deben responder y se van haciendo insuficientes los medios ante la alta demanda. Así visto, este cambio demográfico debe asumirse como una oportunidad.
También promueve este objetivo la calidad de vida que se estableció en los hogares con niños en estas edades. Muy positivo que alcanzaran coberturas en servicios públicos superiores al 99%, que el 98,9% de las viviendas estén construidas con materiales adecuados y que el 97% no tengan hacinamiento; todas son cualidades físicas que redundan directamente en el bienestar social a través de entornos que posibilitan el normal desarrollo de los niños y de sus familiares. Lo que sí empieza a preocupar es que estos hogares estén mostrando aumentos, aunque leves, en los niveles de pobreza monetaria, y hacia allá se deben empezar a enfocar los propósitos para evitar que siga creciendo.
Los aspectos negativos que está mostrando este Informe 2024 deberían ser asumidos como prioridades de intervención en el municipio para transformar esas realidades. Es muy delicado que en los últimos cuatro años, aún siendo menos niños, su afiliación a salud haya caído casi nueve puntos porcentuales, denota que es una población vulnerable que está dejando de recibir la atención adecuada en servicios de salud y que se puede estar poniendo en riesgo su supervivencia. Adicionalmente no tener datos más amplios sobre niveles de desnutrición, sobrepeso y obesidad, está mostrando una realidad a medias, siendo la nutrición de los aspectos más esenciales en el crecimiento y desarrollo del ser humano. Manizales ocupó el tercer puesto a nivel nacional con el mayor número de nacidos vivos con bajo peso.

También causa desazón el aumento de casos, entre el 2023 y el 2024, en las diferentes manifestaciones de la violencia. La intrafamiliar es la que más creció (de 3 a 9 niños afectados), y la sexual pasó de 18 a 23 niños. Según el Informe, Manizales fue la sexta capital con mayor tasa de violencia intrafamiliar y la tercera en delitos sexuales presuntos contra la primera infancia. Todo ello hace que seamos una capital con un panorama agridulce para los niños. Hay que apuntarle a una política social más fuerte y a inversiones que de verdad mejoren el desarrollo infantil para que algún día podamos ser una ciudad amiga de los niños que los haga felices en este territorio.