El sector de la construcción forma parte del sector secundario de la economía por la transformación de las materias primas que en este se utilizan, del cual su producto final son las edificaciones y obras de infraestructura. La construcción es de los principales dinamizadores de la economía, puesto que su cadena de valor se relaciona con cinco grandes subsectores (producción de insumos y materiales, maquinaria, equipo y herramienta, servicios profesionales y técnicos, ejecución de obras, comercialización y servicios posteriores) y adicionalmente genera un efecto multiplicador que incluye unas 30 ramas productivas de servicios. Además, las obras están entre los principales generadores de empleo. En épocas de auge, la construcción puede llegar aportar entre 7% y 9% del Producto Interno Bruto nacional, contribuyendo significativamente al desarrollo y crecimiento económico del país.
Analizando el tema de vivienda en los últimos tres gobiernos, uno de los programas que ha tenido mayor relevancia entre 2015 y 2025 ha sido Mi Casa Ya, que nace en el Gobierno Santos como una de sus cinco locomotoras y como estrategia económica para impulsar el crecimiento, generar empleo y reducir pobreza. El objetivo principal es que las familias de bajos y medianos ingresos puedan adquirir vivienda nueva de interés social (VIS) o de interés prioritario (VIP), con la estrategia de subsidios a la cuota inicial hasta 30 SMMLV, para ingresos entre 0 y 2 SMMLV, y la cobertura a la tasa de interés durante los primeros siete años reduciendo entre 4 y 5 puntos porcentuales los intereses del crédito hipotecario, leasing habitacional, para ayudarles a las personas al cierre financiero.
Con el lanzamiento de Mi Casa Ya la construcción presentó un auge importante para la economía, se tienen datos estimados de venta de vivienda nueva aproximadamente de 1.150.000 viviendas en los dos periodos del Gobierno Santos, lo cual hizo que se lograra una expansión del crédito y aumento en la generación de empleo. Adicionalmente se desarrolló el programa de vivienda gratuita, que entrego más de 100.000 viviendas, 100% subsidiadas, que el actual Gobierno populista no es capaz de hacer.
En el Gobierno Duque, dando continuidad al mismo programa, se vendieron aproximadamente 950.000 unidades de vivienda, fortaleciendo Mi Casa Ya con la entrega de 100.000 nuevos subsidios no VIS para familias de clase media, otorgó de igual forma cobertura a la tasa de interés (frech VIS y no VIS) para ayudar a la reducción de la cuota, además, se habilitaron 16.000 hectáreas para la construcción de nuevos proyectos.
Finalmente en el Gobierno del Cambio, el Gobierno progresista de Petro que supuestamente busca transformar la sociedad para que sea más inclusiva y equitativa, Mi Casa Ya quedó en el aire, registrando una venta de 472.000 viviendas, dado que el programa quedó suspendido con la circular 0012 del 16 de diciembre del 2024, emitida por el Ministerio de Vivienda por la falta de recursos.
Esto ha generado denuncias de miles de familias que no solo perdieron el subsidio preasignado, sino también la inversión de sus ahorros en un sueño frustrado, afectando especialmente a los hogares de ingresos bajos, generando un problema social de marca mayor, un clima de desconfianza y una percepción negativa de las promesas de este Gobierno del Cambio.