A Logam lo rechazaban en sus inicios por su oreja caída, contó su exguía.

Fotos | Freddy Arango | LA PATRIA

A Logam lo rechazaban en sus inicios por su oreja caída, contó su exguía.

LA PATRIA | Manizales

Logam genera respeto. Su nombre se repitió muchas veces ayer en la mañana en el auditorio del Comando de Policía. Todos "sus colegas" lo admiraban y recordaban los operativos en los que participó y los golpes que dio.

Él, fiel a su labor, olía a todo el que se le acercaba. También tenía tiempo de jugar con una pelota. Eran sus últimos minutos en la Policía Metropolitana de Manizales, a la que llegó a la edad de 9 meses, proveniente del Criadero Canino Mancilla de esa institución.

Nació el 5 de enero del 2016, en Facatativá, producto del cruce de sus padres Mambrú y Lan Of Sun Cora. Tras una especialización en narcóticos llegó a la capital caldense, donde estuvo, hasta ayer, por ocho años. Su trabajo olfativo dejó huella y admiración. 150 capturas le contabiliza la Policía.

"Se destacó como un canino excelente, sus servicios fueron de grandes resultados. Aliado en nuestra lucha contra el microtráfico", contó el coronel John Carlos Rojas Rincón, comandante de la Metropolitana.

Logam es conocido como el aliado contra los envíos de vicio y el terror del tráfico de estupefacientes en Manizales.

Foto | Cortesía | LA PATRIA

A su haber están la incautación de 3 mil kilos de marihuana en el 2018, de 180 pastas de éxtasis que venían de Bogotá, de 600 gramos de clorhidrato de cocaína. Decomiso de bazuco, cocaína, éxtasis. Su golpe más reciente: 2.500 gramos de marihuana que provenían de Corinto (Cauca), con destino a la capital caldense.

 

Sorpresa

Tanto a Logam como al subintendente Jairo Alexánder Marulanda -su guía canino tras su llegada a Manizales- les guardaban una sorpresa: el reencuentro, pues el uniformado ya no lo tenía a su cargo.

En la ceremonia de jubilación del canino se anunció que la casa de Marulanda será el nuevo hogar de Logam. Suspiros y voces de satisfacción retumbaron en el escenario, mientras el perro jugaba con una pelota sobre la tarima principal.

Llamaron al subintendente y en un principio Logam no lo identificó, quizá por la falta de uniforme. Pero sacó a relucir su talento olfativo y estalló de felicidad. Dio brincos y le demostró todo el cariño y agradecimiento a su exguía

"Es la cereza que le faltaba al pastel. Con él son ya 20 los perros que tengo en una casa campestre. Lo cuidaré muy bien", expresó ayer en medio de lágrimas el nuevo dueño de este canino.

"Es mi amigo, mi hijo, un milagro de Dios. Un amigo nunca se abandona, más cuando tuvimos anécdotas trabajando juntos. Más que los reconocimientos es no olvidarse de este canino que me hizo reconocer. Sucedieron situaciones con personas que ya no están y que obstaculizaron ese camino que teníamos juntos. Este es un momento muy grande para mí, lo soñé", afirmó Marulanda, que lo vio nacer.

Logam fue producto de una monta no deseada en la escuela de guías, de pastor holandés con labrador, algo no bien visto, contó.

"No encontraba un canino idóneo y me faltaban dos meses para graduarme. Alguien me dijo que Logam era un diamante en bruto y le expresé al perro: 'De usted depende si vamos para Manizales o no'. Le indiqué al instructor que estaba listo el canino y respondió que no creía, pero que íbamos para El Dorado, en Bogotá, una prueba que es cosa de locos. Me manifestó que si encontraba las cuatro sustancias que le pondría, pasaba. Y Logam no me falló. Me felicitaron".

La ceremonia de ayer culminó con los protocolos de estos casos. Los comandantes le retiraron el chaleco a Logam, que ahora disfrutará de su nueva vida al lado de quien lo preparó para su vida uniformada. El binomio abandonó el comando y solo gestos de admiración se oyeron en la calle. "Marulanda, muy merecido que le hayan entregado a Logam".

"Mientras se encamina a su nuevo hogar lleno de amor y de cuidado, luego de dar lo mejor de sí a la institución, le decimos ¡gracias! Recordaremos con gratitud cada ladrido, cada gesto de afecto, nos reconforta saber que ahora estará en un nuevo hogar y podrá iniciar una nueva etapa llena de cariño, alegría y tranquilidad. Nos quedamos con la certeza de haber compartido nuestra vida institucional con un verdadero héroe de cuatro patas": Policía Metropolitana.

Su salida del comando con su "padrastro", el intendente jefe Jesús Alberto Pineda, y su nuevo papá, el subintendente Jairo Alexánder Marulanda.

 


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