Luisa Fernanda Gómez perdió el rastro de su hermano, Carlos Mario, en Manizales hace ocho años cuando su familia lo dio en adopción. Ella espera volver a verlo y que haga parte de las vidas de sus tres hermanos y tres sobrinos.

La mujer explicó que el último contacto fue en una casa hogar ubicada en el barrio La Asunción, en donde compartieron por un rato y él le pedía que lo llevara con ella, sin embargo, no podía hacerlo. Ahora debe tener 18 años, los cumplió el pasado 27 de junio.

La situación económica llevó a la madre a entregarlo en adopción, pero Luisa asegura que si bien estaban en una mala situación, el poco conocimiento y los engaños la motivaron a dárselo a las autoridades.

Al parecer, el niño quedó en manos del padrino, pero habría sufrido maltrato y escapó en búsqueda de la mamá, quien trabajaba en el Centro. Sin embargo, no la encontró porque estaba repartiendo unos domicilios. Se dirigió a donde su abuela en el barrio Galán, quien le aseguró a las autoridades que no había garantías para su cuidado.

"Nosotros no vivíamos bien económicamente, pero tampoco teníamos vicios. A mi madre le dijeron que podía ver a Carlos Mario después, pero nunca pasó. Hablé con el ICBF y me dijeron que no podían darme información y que si él lo decidía, podía vernos. Sé que está en Manizales", dijo Luisa Fernanda.

La mujer, de 25 años, le pidió una oportunidad a su hermano de volverse a ver, de pedirle perdón por lo que pasó. Quiere recordar el tiempo que vivieron juntos, pues era el menor de la familia y con el que más compartía.

"Nos llevábamos muy bien, quiero que me permita estar en su vida porque lo extraño bastante, es un amor que no se acaba de la noche a la mañana. Me ha dado duro no poder estar con él", finalizó.

Contacto

Si usted conoce a Carlos Mario, puede comunicarse al número 3215870297.