LA PATRIA | MANIZALES

A Ovidio Isaza Gómez, alias Roque, de 55 años e hijo del exjefe de las Autodefensas del Magdalena Medio, Ramón Isaza, lo acusaron recientemente en Caldas por desplazamiento forzado.

Curiosamente la investigación comenzó porque su padre, quien aceptó que ordenó el hecho delictivo, lo involucró en ese caso. Data del 9 junio de 1999, en una vereda de Samaná, cuando Ómar Ramírez Valencia; sus dos hijas, Íngrid y Paula, y su esposa, Rosa Elvira Cuéllar Tavera, debieron abandonar la finca a las 5:00 de la tarde. Se indicó que los responsables eran hombres de Ramón Isaza, que amenazaron a esta familia.

Dejaron su tierra y se fueron a vivir a La Dorada. En el oficio 0223 del 28 de junio del 2021, la Unidad de Justicia Transicional compulsó copias luego de la versión libre dada por Isaza, en la que confesó el delito por línea de mando e involucró a su hijo. La pena va de 8 a 18 años.

El año pasado, la Dirección Especializada de Extinción del Derecho de Dominio de la Fiscalía impuso medidas cautelares de embargo, secuestro y suspensión del poder dispositivo a varios inmuebles, muebles, sociedades y establecimientos de comercio. Se trata de 33 activos que harían parte del patrimonio ilícito de personas que estarían involucradas en actividades de narcotráfico.

20 inmuebles, siete vehículos y un establecimiento de comercio harían parte del patrimonio de María Georgina Gómez Isaza y alias Roque. El valor de los bienes ocupados fue tasado en $10 mil 369 millones.

Roque fue condenado a ocho años y nueve meses de cárcel por el Juzgado Penal del Circuito de La Dorada. La Fiscalía explicó que la sentencia tiene que ver con el desplazamiento forzado que soportó una familia campesina en zona rural de Victoria. En el pasado confesó unos 180 crímenes.