Foto | www.freepik.es | LA PATRIA | Recuerde que loncheras con lácteos, como las rebanadas de queso, o con carnes frías, como el jamón, se hacen más peligrosas. Evite su uso o advierta su ingesta en el menor tiempo posible.
La temporada escolar presenta retos en lo académico para los estudiantes. También llega cargada de desafíos para los alumnos y sus padres, que tienen que lidiar con condiciones de salud adquiridas en el ambiente escolar.
Es que el contacto físico con sus similares, según el médico Jorge Iván Marín Uribe, expone tanto a los menores de edad como a sus progenitores y/o cuidadores a infecciones, sobre todo, de corte respiratorio o gastrointestinal.
En lo respiratorio
Él, especialista en microbiología y enfermedades infecciosas adscrito a la Clínica Ospedale, apunta a que -en los comienzos de año- reinan los contagios respiratorios de corte viral.
"Principalmente, las del tracto respiratorio superior (rinitis, faringitis, laringitis, amigdalitis y el resfriado común)", dice el profesional vinculado a la Clínica de La Presentación y quien es docente de la Universidad de Manizales.
Marín menciona que este regreso a clases en la ciudad estará marcado por el aumento de la circulación de los virus descritos, que también se incrementaron por las festividades de fin de año y por la edición 67 de la Feria de Manizales.
Si cae en cama por algunas de estas condiciones, advierte el galeno, lo mejor es no regresar a clases hasta haber superado la infección. Para ello, será crucial buscar ayuda médica, en el menor tiempo posible y no automedicarse, pues eso conlleva riesgos tan complicados como la posibilidad de morir.
"No hay que olvidar el uso del tapabocas para evitar contagiar a otros, a los mismos padres o hermanos que viven en casa. Este elemento siempre pondrá en ventaja al otro, le restarán posibilidades de enfermarse, y al paciente de complicarse aún más"
Salidas
Para salir de esos cuadros respiratorios, es muy útil la abundante hidratación, en busca de una evolución más rápida. El consumo de agua permite, entre otras cosas, la evacuación de toxinas y gérmenes, esos que pueden estar afectando.
La gripe, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), puede ser leve, grave o incluso mortal. La hospitalización y la muerte son más frecuentes en grupos de alto riesgo, como personas inmunosuprimidas y adultos mayores con enfermedades crónicas (calcula que las epidemias anuales causan de 3 a 5 millones de casos graves y de 290 mil a 650 mil muertes).
En los países industrializados, la mayoría de las muertes relacionadas con la gripe se producen en mayores de 65 años. Las epidemias por este mal causan ausentismo laboral y escolar y pérdidas de productividad.
De lo gastrointestinal
"Con las comidas lo que se puede tener son infecciones bacterianas, sobre todo, por el contacto con agua contaminada y con alimentos infectados, por lo que hay que tener mucho cuidado con lo que se les empaca y con lo que compran dentro y fuera de las instituciones educativas", advierte Marín.
Son la Escherichia coli y la Salmonella las bacterias de mayor presencia en los alimentos que no se preparan de la manera correcta o a los que no se les respeta la debida cadena de frío.
La primera de ellas, por ejemplo, es común en el tracto intestinal de las personas y suele expulsarse, a través de la materia fecal. Su presencia en las preparaciones, podría suponer que el manipulador (o consumidor) del producto no se asea correctamente, antes de acercarse al mismo.
"También pueden haber parásitos y hongos que lleven a enfermedades gastrointestinales, que regularmente vienen con diarrea. Ante afecciones de este tipo, hay que buscar atención".
Así las cosas, el lavado de manos es fundamental. Es la principal estrategia, según Marín, con el propósito de evitar la transmisión de cualquier condición, sea de origen bacteriano, por hongos o parásitos.
"La cultura del lavado de manos se ha perdido mucho después de la pandemia, pero hay que volver a insistir en eso, tanto en los niños como en los adultos; para evitar la diseminación de todas estas condiciones".
Valor del agua
El experto sugiere empacarles a los niños alcohol glicerinado, esto para que se lo estén aplicando, si no tienen cómo lavarse sus manos. Él asegura que este producto tiene una efectividad igual, a cuando uno se lava con agua y jabón.
Frente a lo que se pueda ingerir, el profesional hace otras recomendaciones. Pide a los padres no empacar alimentos perecederos a corto plazo o aquellos que se puedan afectar con los cambios de temperatura.
"Hay que tener cuidado con los lácteos, las carnes frías, los enlatados. La gente no tiene la precaución de empacarlos en bolsas herméticas, en aluminio o no se los comen rápido y, cuando acceden a ellos, el calor ya ha iniciado la descomposición de los mismos".
Marín dice que cuando estos productos pasan mucho tiempo a altas temperaturas, se convierten en una fuente de bacterias importante. Ahí, insiste, es que vienen las intoxicaciones alimentarias.
"Las comidas a base de pollo, como el arroz con pollo, y las ensaladas son un poco complicadas. Si se empacan deben comerse rápido y no dejarlas para el final del día. Los menores de edad deben abstenerse de adquirir los productos que les expenden a la salida de las instituciones educativas, pues no se sabe -a ciencia cierta- la procedencia de ello ni la manipulación que han tenido".
Un pinchazo por salud
"La vacunación es otra estrategia importante para prevenir gran parte de las infecciones respiratorias y gastrointestinales, sobre todo, en los niños. Es una tarea para todos los padres, el completar el esquema de vacunación de sus niños, que es gratuito", señala el médico Jorge Iván Marín Uribe.
Para acceder a los biológicos, acerque al pequeño a la EPS que le corresponda. Allí le informarán los horarios de atención y las dosis habilitadas, entre las que se cuenta el fármaco contra el coronavirus. Por precaución, usted también podría inmunizarse frente algunas condiciones.
Las frecuentes
Estas son algunas de las condiciones respiratorias que suelen desarrollarse en los escolares:
- Rinitis: Irritación e inflamación de la mucosa de las fosas nasales.
- Faringitis: Dolor e irritación en la garganta, que viene con dolor al tragar.
- Laringitis: Irritación e inflamación de la laringe por infección; en algunos casos por exceso de habla y su volumen.
- Amigdalitis: Hinchazón de las amígdalas, estructuras de la parte posterior de la garganta.
- Resfriado común: Infección que toca a la nariz y a la garganta, que suele venir con secreción nasal y frecuentes estornudos.
Tenga en cuenta
Las clínicas y los hospitales pueden verse desbordados por este tiempo de altos contagios respiratorios. Asista solo cuando sea necesario.