Amarte y amar es tu reto, tu camino y tu destino. Pero el amor es un estado del ser, no una relación.
Debes cuestionar tu capacidad de amar para no engañarte con un amor fácil y cómodo.
El amor es exigente y florece donde hay respeto y entrega, comprensión y verdad, perdón y humildad.
El amor unifica y no te lleva a competir con los demás, sino a entenderlos y aceptarlos.
“Cuando amas conquistas la ira con la bondad, la malicia con el bien y la ruindad con la compasión”, Proverbio hindú.
El mal hace ruido y obtiene victorias pasajeras, pero el amor termina por imponerse y te lleva a la cumbre.
Por eso decía Jesús que debes devolver bien por mal y amar a los que te hacen daño.
Cuando lo haces brilla la luz y disfrutas una alegría que nadie te puede quitar. Sólo el amor te da felicidad.
@gonzalogallog