El Premio Nobel de Química 2025 fue otorgado a tres científicos: el japonés Susumu Kitagawa, el británico Richard Robson y el jordano Omar M. Yaghi por el desarrollo de estructuras metal-orgánicas, un nuevo tipo de arquitectura molecular empleado para recoger agua del aire del desierto, extraer contaminantes del agua, capturar dióxido de carbono y almacenar hidrógeno. El Premio Nobel de Física concedido al británico John Clarke, el francés Michel H. Devoret y el estadounidense John M. Martinis por descubrir el efecto túnel cuántico macroscópico, que ha abierto posibilidades para desarrollar la próxima generación de tecnología cuántica.