Pablo Cuartas, docente de la Universidad Autónoma de Manizales (UAM), habló con LA PATRIA Radio sobre las pasadas elecciones en Francia, sus conclusiones, análisis y predicciones de la vida política del país.  Esto dijo: 

¿Cuál es el contexto que hay que tener para entender lo que está pasando legislativamente en Francia?

Pasó que hubo unas elecciones al Parlamento Europeo en Francia y el resultado del partido que traducen como Agrupación Nacional sacó una votación altísima, inesperadamente alta, y eso prendió muchas alarmas, entre otras la del presidente Macron. 

Se presentó un ascenso ya en las urnas confirmado por la extrema derecha en las elecciones europeas, eso fue hace más o menos un mes y medio.

El presidente Macron entonces lo que decidió fue anticipar las elecciones legislativas. 

Él tiene esa prerrogativa constitucionalmente, tiene esa potestad. Eso también admite muchas lecturas.

Lo cierto es que adelantó las elecciones que tuvieron la primera vuelta hace una semana y la segunda vuelta el domingo. 

En la primera vuelta se mantenía la tendencia de las europeas, pero en la segunda no, entonces es muy interesante entender qué pasó, por qué esa tendencia se cayó, si generalmente se mantienen.

Entre una elección y otra, en cuestión de una semana, se desvió una tendencia electoral. Donde es protagonista no un partido, sino una fusión de partidos de izquierda y de centro que se llama el Nuevo Frente Popular. Esa unión fue un todos contra uno.

¿Quiénes son todos? los partidos de izquierda y de centro, ¿y quién es uno contra el que todos se unieron? La Agrupación Nacional de Jean-Marie Le Pen, su hija Marie Le Pen, etc. 

¿Qué conclusiones o análisis tiene al respecto? 

El nuevo Frente Popular apuntó a presentar como una alternativa catastrófica la posible llegada de la Agrupación Nacional al poder. Y eso dio resultado, logró también movilizar a gente que generalmente no vota, logró movilizar a mucha gente joven y eso explica cómo de una semana a otra un resultado cambia.

Ese cambio se traduce en una situación muy complicada. Cuando Macron toma esa decisión de disolver la Asamblea y llamar otra vez a elecciones legislativas, yo dije: tal vez lo que él quiere es dividir a la derecha y unir a la izquierda. 

Cuando ganó la derecha la primera vuelta, yo dije: no le salió.

Ahora con la segunda vuelta sí le salió. Es decir, unió a la izquierda y también dividió a la derecha. 

A la larga no le salió tan bien porque lo que resultó de esa jugada no es tan conveniente para él. El parlamento quedó dividido en tres partes casi iguales, dos de las cuales están en las antípodas políticas, la extrema izquierda y la extrema derecha. 

Eso plantea un escenario de gobernabilidad muy comprometido, va a ser muy difícil que el gobierno de Macron tenga el favor de la Asamblea y eso es lo que nos espera más o menos en Francia.

Un panorama donde está comprometida la gobernabilidad del presidente, y por eso es tan importante la elección del primer ministro, porque el primer ministro en ese sistema tiene mucho poder, es como quien realmente gobierna.

¿Qué lectura política entrega para lo que se viene en Francia? 

Esta elección y todo esto que está sucediendo es interesante en sí mismo, pero también es interesante porque tiene que ver con nosotros. 

Son como ondas y esas ondas llegan hasta acá y nosotros tenemos también a la vuelta de la esquina como en Francia, elecciones en el 2027.

De algún modo todo eso termina influyendo también en lo que pasa acá en la región y concretamente en Colombia. 

Entonces, hay que tener esta perspectiva de las relaciones internacionales. Vivimos en un mundo que está interconectado y finalmente todo eso puede tener repercusiones en nuestra propia realidad. 

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