LA PATRIA | MANIZALES

Desde el 16 de julio los trabajadores formalizados comenzaron a trabajar una hora menos en el país.

El nuevo beneficio laboral se logró a través de la Ley 2101 del 2021 que estableció que la jornada laboral en Colombia pasará de 48 horas a 47 durante este año y se irá disminuyendo cada año hasta establecerse en 42 horas en el 2026.

Empresarios en Manizales destacan que ven con buenos ojos la medida del Gobierno Petro, ya que brinda mayor calidad de vida a las personas. Sin embargo, sostienen que esto también representa un desafío para los empleadores, ya que deben producir lo mismo en menos horas de trabajo para evitar sobrecostos que se podrían generar.

La medida

De acuerdo con lo establecido, la reducción de la jornada empezó el pasado fin de semana en 47 horas, en el 2024 pasará a ser de 46 horas, en julio del 2025 será de 44 horas y, finalmente, en el 2026 quedará establecida en 42 horas.

La ley dice que los trabajadores y los empresarios podrán concertar cómo se distribuirán las horas de trabajo, pues no es posible que la jornada diaria sea menor a 4 horas y tampoco superior a las 9 horas. Además, los empleados tienen derecho a por lo menos un día de descanso cada semana.

También se debe tener en cuenta que con la medida no se disminuirá el salario, motivo por el cual las personas trabajarán menos, pero seguirán ganando lo mismo. Por esta razón, según la Dirección Territorial del Ministerio del Trabajo caldense, la hora de trabajo aumentó de costo, por ejemplo, una persona que devenga un salario mínimo en Colombia, recibía $4 mil 833 por hora trabajada (sin auxilio de transporte), ahora la remuneración diaria es de $4 mil 936, un aumento del 2,1%.

La medida no aplica para los servidores públicos, excepto para los que estén vinculados con empresas del Estado que se rigen por el Código Sustantivo del Trabajo.

El debate

El Ministerio del Trabajo argumenta que dicha ley permitirá al país acercarse a los estándares internacionales recomendados por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), de brindar más tiempo libre a los trabajadores para mejorar la productividad en las compañías.

Sin embargo, para Jorge García, profesional de la Oficina de Estudios Económicos de la Cámara de Comercio de Manizales, la iniciativa no es pertinente en el actual contexto económico, puesto que los empresarios vienen de superar la pandemia y además de una desaceleración económica. "La medida funciona si la productividad aumenta, pero vemos que no es así porque Colombia tiene los registros de productividad más bajos frente a otros países. Primero se debe aumentar la productividad y luego sí bajar la jornada laboral", expresó.

Según el analista, la nueva Ley podría aumentar los costos para los empresarios y, por ende, aumentar el desempleo. Agregó que los sectores más afectados serían los hoteles, los restaurantes y el industrial.

Una dificultad necesaria

Para Germán Olarte, presidente del Grupo Siteco, que la medida traerá dificultades para el sector, pero cree que es un mal necesario que debe asumirse, pues ya hay países que funcionan con una jornada de 42 horas.

"Nos tocará hacer lo mejor que podamos para aumentar la eficiencia en los empleados y en los procesos de producción para no incurrir en sobrecostos, que se generan al tener menos horas a la gente trabajando por el mismo salario".

Según las cuentas del empresario, la compañía de unos 600 trabajadores tendría que contratar otras 9 personas para seguir produciendo lo mismo en 47 horas semanales. Aseguró que la idea es mejorar la tecnificación en los procesos y brindar a los empleados todas las herramientas para ser más eficientes.

Germán López, gerente de Toptec, asegura que el problema no obedece a las horas que conforman la jornada laboral, sino en la productividad de las empresas en ese tiempo. "Estamos esforzándonos para que en el tiempo de trabajo que queda tengamos la misma producción, hubo que hacer unos ajustes en los procesos, no creemos que esta medida genere más empleo, sino que habrá que buscar la forma de obtener una mayor productividad. Si lo logramos, bienvenida sea la medida en función de la calidad de vida de las personas", dijo.

El caso es más grave para el sector hotelero, pues según Juan Pablo Alba Cruz, director de Cotelco Caldas, el gremio ha enfrentado en los últimos años, no solo la pandemia, sino también el aumento en el costo de los tiquetes aéreos y la emergencia en el Ruiz, que dificultaron la visita de turistas y, por tanto, los ingresos en el sector.

"Nos preocupa un poco, pues en el sector somos ocasionales, trabajamos las 24 horas y al reducir la jornada, pues tendremos que incrementar la nómina. Habrá que buscar gente que supla esas horas en las que no tendremos personal disponible. Son normas que hay que acatar".

Alba Cruz añadió que los cerca de 1.200 hoteles caldenses, a raíz de la suma de dificultades, no tendrán de otra que trasladar los mayores costos de nómina al consumidor final.

Sanciones

Reducir la jornada laboral no es opcional es obligación de los empleadores. Si una compañía, empresa o establecimiento no cumple, los trabajadores tendrán derecho de quejarse ante el Ministerio del Trabajo y el empleador sería sancionado.

Caso exitoso

La empresa de jabones Hada, creada en Manizales, fue la primera en establecer una jornada laboral reducida. Roberto Gutiérrez Pedrozo, gerente administrativo, asegura que hay empleados que solo laboran 40 horas a la semana, ya que la compañía de unos 750 empleados redujo su jornada laboral de 5 días a la semana a solo 4 días.

La medida empezó a implementarse en enero del 2020, e incluso un operario de la empresa tiene derecho a descansar tres días a la semana, dependiendo de la rotación. Para lograrlo la empresa invirtió en tecnología, mejoró la capacidad instalada y simplificó los procesos de producción, incluso está incursionando en inteligencia artificial.

"Estudiamos la medida y no solo hemos logrado aumentar la satisfacción de los trabajadores, sino también mejorar los índices de productividad. Los resultados han sido positivos y estamos contentos", dijo el gerente, quien aseguró que seguirán buscando la comodidad del personal, para que disfruten de un equilibrio entre vida y trabajo.

Agregó que la reducción de la jornada ha mejorado la productividad. "Nosotros venimos de niveles de crecimiento anuales en la operación entre el 50% y el 60%, con la misma gente y una jornada laboral reducida. Entre el 2020 y el 2021 crecimos casi un 100% y entre el 2021 y el 2022 un 50%. Hemos tenido un crecimiento importante y que no se han visto afectados por tener jornadas reducidas de trabajo, sino al contrario", concluyó.

Agregó que uno de los secretos para mejorar la productividad estuvo también en la forma de comunicarse, pues dejaron de utilizar una comunicación tan "adornada y compleja" y lo empezaron a hacer de una manera más directa.

Lo bueno y lo malo

Suelen Emilia Castiblanco, analista económica

Lo bueno es que la reducción de la jornada laboral va en línea con lo que está sucediendo en el mundo. Sobre todo bajo la premisa de que con los avances tecnológicos y con el aumento de la productividad, ya no se requieren 48 horas semanales de trabajo. Desde que las personas sigan ganando lo mismo, entonces los trabajadores van a tener mayor tiempo de descanso para dedicarlo a actividades de esparcimiento.

Lo negativo es que los empresarios se comprometieron a que no habrá una reducción en los salarios, pero eso está por verse. Muchos de los contratos están conformados bajo la jornada laboral máxima, dado a que hay contratos a término fijo y que a veces no se garantiza la continuidad de los contratos, entonces puede pasar que los empresarios disminuyan el salario real de los trabajadores para ajustarse a la nueva cantidad de horas que va a tener la jornada. El Ministerio del Trabajo debe hacer un trabajo exhaustivo para que eso no suceda, sino los trabajadores van a ocupar las horas de reducción en buscar otros trabajos y hacer horas extras, por lo que la medida perderá su propósito.