Además de calificar el café como un  endulzante que combinaron con otros cafés de peor calidad, el presidente Petro también cuestionó la falta de industrialización, la desaparición del Pacto de Cuotas del Café, por lo que culpó a Colombia, y por el poco control que hoy se tiene en el mercado. Esto le respondieron los cafeteros

¿Se perdió enfoque?

El el delegado por Caldas al Comité Directivo y Nacional del gremio, Eugenio Vélez Uribe, cuestionó la crítica de Petro con respecto a que el café perdió su predominio y su eje estructurador del pasado. "Esto es completamente alejado de la realidad porque el eje estructurador es la Federación de Cafeteros desde 1927. Si no fuera por esto, los pequeños cafeteros se mantendrían a los vaivenes del mercado y sería inviable la caficultura que tenemos hoy, por eso preocupa ese nivel de desinformación al decir que no se ha hecho nada".

Adiós al Pacto de Cuotas

Petro también dijo que los cafeteros de que dejaron acabar el Pacto de Cuotas, acuerdo mundial que funcionó hasta 1989 y cuyo objetivo era mantener a raya la oferta mundial y un buen precio entre los países productores. Lo comparó con la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) para decir que este pacto sí se ha mantenido.

Para Vélez Uribe esta es otra comparación equivocada, puesto se trata de países ricos que controlan la oferta "cerrando la llave" de la extracción para regular la oferta y la demanda. "En el café no es así, son cerca de 60 países y unos 25 millones de productores, la mayoría pequeños y pobres, que están lejos de poder conformar un cartel. En Colombia hay una organización que los aglutina, pero para asociarlos y trabajar en favor de la producción y actividad comercial".

Recordó que aunque se han hecho intentos para tener un acuerdo similar han sido solo buenas intenciones en un mercado de libre oferta y demanda. "Es que no se puede dejar de vender y exportar, la Federación no puede decirles 'paremos de vender para que suba el precio', no tiene esa capacidad de comprar y guardar para incidir en el precio y el país tampoco. Es imposible en un escenario de mercado libre, por eso el Pacto de Cuotas se acabó, no porque Colombia quisiera, sino porque desafortunadamente el cliente, que son los países consumidores, son los que manejan el mercado".

La industrialización

Sobre el cuestionamiento de la falta de industrialización, los cafeteros insistieron que se desconocen trabajos como los que han hecho la fábrica Buencafé Liofilizado de Colombia en generación y valor agregado por 50 años, además de Procafecol, que representa las tiendas Juan Valdez. "Pero eso no es tan sencillo como decir que todos hagamos procesos y vendamos al exterior. ¿Si es tan fácil entonces porque se exporta petróleo en bruto, por qué no lo procesan en Colombia, procesan la gasolina y montan estaciones para venderle directamente al consumidores?", se preguntó.

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